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Sebastián Sansón Ferrari - Ciudad del Vaticano

El arzobispo Emilio Nappa, presidente de las Obras Misionales Pontificias (OMP), ha reconocido la "extraordinaria generosidad de la Iglesia universal con la Iglesia en Estados Unidos". Así ha comenzado su alocución frente a los más de 120 directores y representantes de las OMP de diócesis estadounidenses reunidos en Puerto Rico para la apertura del VI Congreso Misionero Americano (CAM6), según informa la Agencia Fides.

Bajo el lema "América, con la fuerza del Espíritu, testigos de Cristo", se busca promover con nuevo vigor la misión ad gentes de la Iglesia, caminando juntos en la escucha del Espíritu, "para ser  testigos de la fe en Jesucristo en la realidad de nuestros pueblos y hasta los confines de la tierra". En el encuentro se prevé la participación de más de 1200 personas procedentes de más de 40 países. Entre otros asuntos, se abordarán las implicaciones sociales del "Reino como horizonte de la misión", el envío misionero y la vocación de "Discípulos misioneros iniciados y enviados".

Durante la habitual reunión de formación precedente al CAM6, Nappa enfatizó que Estados Unidos, a lo largo de su historia, ha pasado de ser un receptor de ayudas a ser "un gran contribuyente a la Iglesia misionera", desde el punto de vista económico y espiritual. En este sentido, evocó las figuras de la Madre Francisca Saveria Cabrini y Santa Isabel Seton, la primera santa nacida en Estados Unidos.

El prelado invitó a todos los católicos de Estados Unidos a conocer y participar en el trabajo de las OMP, recordando la prioridad de apoyar las intenciones misioneras universales del Santo Padre. En su mensaje, el Presidente de las Obras se refirió al Fondo de Solidaridad Universal que apoya los esfuerzos misioneros en más de 1100 diócesis de los territorios de la misión. Además, Nappa planteó la necesidad de reevangelizar "y, precisamente a través de la solicitud de ayuda para otras personas, disponemos así de un medio para dar a conocer el Evangelio".

Este congreso es la undécima edición de una iniciativa que inició en México, en 1977. Desde entonces, dichos encuentros han sido un "verdadero acicate misionero para la Iglesia en América", que se fueron sucediendo con las siglas COMLA (Congreso Misionero Latinoamericano). Luego, con la incorporación de Estados Unidos y Canadá, modificaron el nombre de la convocatoria a "Congreso Americano Misionero", integrando a las dos naciones y dando paso a las nuevas siglas CAM. El anterior congreso tuvo lugar en Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, en julio de 2018.