ҽ

Gibraltar: inauguración del campeonato. Gibraltar: inauguración del campeonato.

En Gibraltar, la Medalla de la Eficacia y la Amistad

Los Campeonatos de Europa de Pequeños Países del Territorio Británico de Ultramar se organizaron de la mejor manera posible. A Athletica Vaticana, el equipo representativo de la Santa Sede, le corresponde el mérito de haber competido en nombre del diálogo y la paz.

Giancarlo La Vella - Gibraltar

Junto a Gibraltar, organizador de la edición 2024 de los Campeonatos de Europa de Pequeños Estados, que se celebraron ayer, sábado 22 de junio, había otros 17 países que sólo son pequeños en cuanto a tamaño geográfico, pero que tienen muchas ganas de enfrentarse y reunirse en nombre del deporte. Sin hacer daño a nadie, enumerémoslos: Albania, Andorra, Armenia, Azerbaiyán, Bosnia Herzegovina, Chipre, Georgia, Islandia, Kosovo, Liechtenstein, Luxemburgo, Macedonia del Norte, Moldavia, Malta, Principado de Mónaco, Montenegro, San Marino y la Ciudad del Vaticano, que participó a través de Athletica Vaticana, el organismo de la Santa Sede encargado de las actividades competitivas. Cada país presentó un equipo formado por numerosos atletas que participaron en las distintas especialidades del atletismo. Se compitió en velocidad, campo a través, salto de altura, salto de longitud y lanzamiento de peso. Los mejores recibieron las proverbiales medallas de oro, plata y bronce.


El estadio de Gibraltar, una auténtica joya, con vistas al peñón y a través del estrecho y África, acogió todas las especialidades. La plana mayor del atletismo europeo expresó su aprecio por el nivel de esta edición y por la participación de Athletica Vaticana. Frank Carreras, presidente de la Asociación de Atletismo de los Pequeños Estados de Europa y de la Federación de Atletismo de Gibraltar, así como miembro de la Federación Europea de Atletismo, recordó el gran impulso dado por el Papa Francisco a un deporte que dice mucho más que el mero rendimiento competitivo. El deporte es algo mucho más: es esa plataforma en la que nos unimos para experimentar la humanidad, en la que ganar o perder no le quita la dignidad a nadie". Dobromir Karamarinov, Presidente de las Federaciones Europeas de Atletismo, está de acuerdo con este comentario y espera que el fenómeno de las competiciones entre atletas de pequeños Estados europeos pueda extenderse a todo el mundo.

El mérito del equipo de la Santa Sede es haber creado un ambiente de gran familiaridad, no sólo internamente, sino también en su relación con los demás equipos. Tanto es así que los atletas que vestían los maillots blanco y amarillo recibían a menudo el apoyo de todo el público: Carlo Pellegrini en la carrera de montaña, Giuseppe Tetto en el lanzamiento de peso, Emiliano Morbidelli protagonista en la carrera de fondo, con Rien Johan Schuurhuis y Giuseppe Zapparata. Para este último, "histórico tercer puesto en los 110 vallas", comentó inmediatamente el presidente de Athletica Vaticana, Giampaolo Mattei, obtenido nada más competir en el relevo. Al frente de este grupo de amigos estaban la vicepresidenta de Athletica, Valentina Giacometti, y el director técnico, Claudio Carmosino. "Particularmente significativo -recuerda Mattei- fue el regalo del testigo del relevo, firmado y bendecido por el Papa Francisco, entregado simbólicamente a la comunidad deportiva de los pequeños estados de Europa, para relanzar desde Gibraltar un mensaje de inclusión, fraternidad y solidaridad a través del deporte, para que triunfe la paz", concluye.

 

Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí

23 junio 2024, 13:43