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Santa Misa en la Basílica de San pedro en el marco del Sínodo de Obispos Santa Misa en la Basílica de San pedro en el marco del Sínodo de Obispos  (Vatican Media)

Sínodo: "Cada bautizado sea un canal activo de la paz"

En la homilía de la misa celebrada en el altar de la Cátedra en la Basílica Vaticana, el arzobispo de Vilna habla de san Lucas, celebrado hoy por la Iglesia, y de la responsabilidad de los creyentes: Estamos llamados a permanecer fieles en el compromiso de caminar juntos

Alessandro De Carolis - Ciudad del Vaticano

"La Iglesia está abierta a todos, pero la paz de Dios se da a las condiciones de Dios, no a las del hombre". Llega claro el mensaje que brota del episodio referido por Lucas, el evangelista cuya fiesta celebra hoy la Iglesia. El pasaje de la liturgia de hoy habla de Jesús que envía a 72 discípulos a los pueblos, invitándolos a decir en cada casa en la que entrarán: "Paz a esta familia". Una paz - es la reflexión ofrecida por monseñor Gintaras Grušas, arzobispo de Vilna y presidente de la Conferencia episcopal lituana, que habla desde el altar de la cátedra en San Pedro - que no es "la paz que da el mundo, pero el shalom, la paz que viene de la vida interior de Dios".

"Shalom", la paz del corazón de Dios

De esta paz, afirma el prelado en una de las Misas que abren cada nueva sección del Sínodo en curso, "cada bautizado, habiendo recibido la gracia salvífica de Dios, debe ser un canal activo". Un tema de gran actualidad en el escenario trágico que el planeta está conociendo por los demasiados frentes de guerra abiertos, recordados poco antes también por el Papa en la audiencia general. La paz de Dios, como su misericordia, dice monseñor Grušas, "se ofrece a todos, pero Jesús sabe que no todos están dispuestos a recibirla". Para hacerlo, explica, "primero hay que pedir la misericordia de Dios. La paz interior (shalom) es el signo de la recepción y de la acogida de la misericordia de Dios".

Mujeres y hombres de fe

Además, la experiencia que viven los 72 discípulos es signo también de la responsabilidad que los creyentes tienen en la misión de la Iglesia. Viene en primer plano, subraya el prelado lituano, "la igualdad de todos los bautizados". Todos, sostiene, "están llamados a esto, no solo los ministros ordenados" y, por lo tanto, es importante "que todos los bautizados escuchen esta llamada, esta vocación y respondan a ella, comprometiendo su vida, sus palabras y sus acciones en la misión de Jesús". En particular, el presidente de los obispos de Lituania recuerda a las figuras femeninas que salpican el Evangelio de Lucas y son protagonistas de su anuncio. "No solo María - recuerda - sino también la Samaritana en el pozo que anunció al Mesías, María Magdalena, la primera en anunciar el mensaje de la Resurrección, así como las diversas mujeres que, en los Hechos de los Apóstoles, asisten al crecimiento de la Iglesia primitiva".

Sinodalidad no es un fin en sí misma

La vida de san Lucas, había dicho al principio monseñor Grušas, muestra "una mentalidad sinodal, fidelidad y fuerza de ánimo" y "también nosotros - dice el prelado a los participantes en el Sínodo - estamos llamados a permanecer fieles en el compromiso de caminar juntos en la vida de la Iglesia y en las dificultades del camino, incluso cuando no está claro dónde Dios nos está llevando a corto plazo". Y, por lo tanto, concluye, "mientras seguimos hablando de qué procesos, estructuras e instituciones son necesarias en una Iglesia sinodal misionera, debemos asegurarnos de que estos ayuden efectivamente a la misión de llevar la Buena Nueva a quienes tienen necesidad de salvación. La sinodalidad (incluidas sus estructuras y sus reuniones) debe estar al servicio de la misión de evangelización de la Iglesia y no convertirse en un fin en sí misma".

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18 octubre 2023, 12:50