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Fausta Speranza - Ciudad del Vaticano

En el Aula Magna de la Pontificia Universidad Lateranense se ha celebrado esta mañana la ceremonia de entrega del título de "Magister en Cooperación Internacional" al Embajador de Italia ante la Santa Sede, Pietro Sebastiani, que era Director General de Cooperación en el Ministerio de Asuntos Exteriores italiano. 

El ars diplomatica en la imagen del Cardenal Parolin

La ceremonia tuvo lugar en presencia del cardenal Piero Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, quien recordó, entre otras cosas, cómo es habitual definir la actividad diplomática como "un arte y no una ciencia", explicando que sólo puede ser un proceso in fieri -dijo- dictado por la profesionalidad y la humanidad. Y el Secretario de Estado ofreció un ejemplo preciso: como un cuadro -dijo- sobre el que se pueden añadir detalles o retoques. Con una recomendación: incluir en la actividad diplomática aquellas características que, resistiendo a la tentación de unas relaciones demasiado fluidas y directas, puedan representar un marco adecuado para servir al objetivo del bien común. Distingue, pues, entre la mera formalidad y un ceremonial discreto y útil.

El papel de la humildad en "un contexto debilitado y deshilachado"

El embajador Pietro Sebastiani explica lo importante que es una actitud humilde para construir el tejido de relaciones y el diálogo que se necesita para alcanzar algún tipo de superación de las diferencias o cualquier tipo de acuerdo. De lo contrario", subraya, "el diálogo se hace muy difícil". Entre otras cosas, el embajador se detiene en el momento actual para subrayar la necesidad de restaurar o renovar "la arquitectura" del orden internacional, que se basa sustancialmente en la que se quiso establecer después de la Segunda Guerra Mundial para garantizar la paz mientras el mundo ha cambiado. Lo que se necesita", dice, "es un nuevo sistema de reglas, un nuevo pacto internacional para evitar la lógica de la mera oposición que en la historia de la humanidad ha llevado al conflicto. Habló de los nuevos retos y de la importancia de comprender que todos estamos en el mismo planeta, con tantos desafíos en términos de recursos y desigualdades que afrontar. Menciona la cuestión del cambio climático, reclamando una ecología humana y no sólo medioambiental.

Del compromiso activo a la educación

El rector Buonomo confirmó que le gustaría pedir al embajador Sebastiani que ponga su amplia experiencia al servicio de los estudiantes de la universidad y, en particular, del máster específico de cooperación internacional. Miramos al pasado", explica, "con el compromiso de abrir perspectivas de futuro. Este es precisamente el mandato de la Universidad, que prepara a las generaciones futuras", añade.  Sebastiani nació en Capannori (Lucca) en 1957 y entró en el servicio diplomático en 1984. Ha prestado servicios en Moscú, Nueva York, París y Bruselas. Fue Representante Permanente de Italia ante las Organizaciones de las Naciones Unidas en Italia y Embajador de Italia en España entre 2013 y 2016. Fue miembro del Gabinete de los Ministros de Asuntos Exteriores Andreatta, Elia, Martino, Agnelli y Dini en 1993-96. Fue Consejero Diplomático del Presidente de la Cámara de Diputados durante la 14ª legislatura y de 2005 a 2008 Consejero Diplomático del Presidente de la Unión Interparlamentaria en Ginebra.