El Papa: Que su fe inspire proyectos y decisiones según el Evangelio
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En su , el Papa Francisco se reunió con las autoridades, la sociedad civil y el Cuerpo diplomático en Dili, la capital de Timor Oriental, en el Palacio Presidencial como parte de su 45º Viaje Apostólico Internacional, que tras Indonesia y Papúa Nueva Guinea lo llevará también a Singapur.
Tras saludar a los presentes, el Pontífice afirmó:
Inculturación de la fe y evangelización de la cultura
El cristianismo se incultura, toma las culturas y ahí los diversos ritos orientales, de los diversos pueblos, porque una de las dimensiones importantes del cristianismo es la inculturación de la fe. Y, a la vez, evangeliza las culturas. Este binomio para la vida cristiana es importante: inculturación de la fe y evangelización de la cultura. No es una fe ideológica, es una fe enraizada en la cultura
Tras recordar que “desde el 28 de noviembre de 1975 hasta el 20 de mayo de 2002, es decir, desde la declaración de la independencia hasta su restauración definitiva, Timor Oriental ha vivido los años de su pasión y de su prueba más grande”, el Obispo de Roma destacó el sufrimiento padecido y añadió:
Arraigados en la fe
El Santo Padre recordó que para alcanzar sus importantes metas, les ha sido de gran ayuda el estar arraigados en la fe, como lo puso de relieve san Juan Pablo II cuando visitó su país. A lo que añadió espontáneamente:
La paz de la unidad es superior al conflicto
Además señaló que “la unidad es superior al conflicto, siempre. Y que la paz de la unidad es superior al conflicto”.
El fenómeno de la emigración
Refiriéndose a los muchos retos actuales, el Papa dirigió su pensamiento al fenómeno de la emigración, “que constituye siempre un indicador de un insuficiente o inadecuado uso de los recursos, así como de la dificultad de ofrecer a todos un empleo que produzca beneficio justo y que garantice a las familias los ingresos que correspondan a sus necesidades básicas”.
En cuanto a las “situaciones que pueden ser consideradas verdaderas plagas sociales, como el abuso en el consumo de bebidas alcohólicas entre los jóvenes", Francisco añadió:
Después de agradecer lo que el presidente de esta nación le había comentado acerca de la educación, el Santo Padre afirmó:
Además, el Papa les dijo “hay una cosa que yo se las quisiera decir, que no está en el discurso, porque la llevo muy adentro”:
La riqueza de ser un pueblo joven
En cuanto a la joven población de este país Francisco se refirió a dos naciones europeas “donde la edad media es de 46 años y 48 años. Y ustedes, el 65% tiene menos de 30 años, lo cual podemos pensar que la edad media será alrededor de los 30 años, un poco menos. Es una riqueza esa”.
“Sigan adelante”, prosiguió diciendo. “Creo que hay varias universidades ya, aunque por ahí son demasiadas, hay más, hay varios colegios secundarios ya, cosa que quizás hace veinte años no había. Eso es un ritmo de crecimiento muy grande, ¿no?”.
El Papa no olvidó manifestar la alegría que le causa ver sonreír felices a los chicos, con su entusiasmo y frescura que son la proyección hacia el futuro.
También los invitó a confiar “en la sabiduría del pueblo”. Porque como les dijo, “el pueblo tiene su sabiduría. Confíen en esa sabiduría”.
Y concluyó su alocución encomendando Timor Oriental y todos sus habitantes a la protección de la Inmaculada Concepción, su Patrona celestial invocada con el título de Virgen de Aitara.
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