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El  Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, en audiencia con el Papa Francisco en octubre 2021 El Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, en audiencia con el Papa Francisco en octubre 2021  

Welby: Francisco, hombre de humanidad extraordinariamente profunda

El Arzobispo de Canterbury y Primado de la Comunión Anglicana se une con un mensaje a las felicitaciones que desde el mundo entero le han llegado al Papa Francisco con motivo de su 10 años de Pontificado y evidencia tres rasgos del Pontífice: su notable capacidad intelectual y de carácter, la profundidad de su corazón y su genuina sencillez

Justin Welby, Arzobispo de Canterbury - Primado de la Comunión Anglicana

La primera vez que me reuní con el Papa Francisco fue a los dos o tres meses de mi mandato y estaba muy nervioso. Nunca me había reunido con un Papa, no sabía qué pensar, no sabía qué tipo de persona era. Entramos, me senté y me dijo: "Soy mayor que tú...", y pensé: "Dios mío, va a ser uno de esos...". Y añadió: "... ¡por tres días!". Porque había empezado su pontificado tres días antes de que yo empezara mi encargo. Ese comienzo me reveló muchas cosas sobre el Papa Francisco y caracterizó mi experiencia con él.

He experimentado su humanidad extraordinariamente profunda, que no hace concesiones sobre la verdad, y que atribuye un valor infinito a todo ser humano. Muchos lo dicen -yo lo digo-, pero él lo vive. Lo segundo es una notable apertura en el enfoque de la moral. Trata de ver los problemas a través de una lente diferente, de una manera diferente. Quizá se deba a su formación como jesuita. No lo sé, ocurre a menudo con los jesuitas, pero el resultado es que aborda los problemas desde un ángulo sorprendente. Si hablas con él de los muchos problemas a los que se enfrenta la Iglesia, él mira dentro del corazón del hombre y encuentra formas de amar que consiguen desbloquear las partes endurecidas del corazón.

La tercera cosa que me gustaría decir de él es que la sencillez que muestra es una sencillez genuina. Estas tres cosas: su notable capacidad intelectual y de carácter, la profundidad de su corazón y su sencillez le permiten llegar de manera extraordinaria a aquellos que están fuera de la Iglesia, como hacía san Juan Pablo II. Hay una profundidad que es una bendición para toda la Iglesia, no sólo para la Iglesia católica romana.

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12 marzo 2023, 16:00