蜜桃交友

Sebastián Sansón Ferrari 鈥� Pope

Permanecer firme, con los pies y el corazón bien plantados en la tierra, con capacidad de una mirada atenta a la realidad y a los acontecimientos de la historia. Esta es la invitación que el apóstol Pablo plantea a la comunidad de Tesalónica en su primera carta y es el disparador del . Difundido en la mañana de este viernes 16 de diciembre, se titula 鈥淣adie puede salvarse solo. Recomenzar desde el COVID-19 para trazar juntos caminos de paz鈥�.

En cinco puntos, la pluma del Pontífice sobrevuela las problemáticas del mundo actual, entre la pandemia del coronavirus, sus efectos y los conflictos aún activos en el mundo, con especial referencia a la guerra en Ucrania. Precisamente, 鈥渁unque los acontecimientos de nuestra existencia parezcan tan trágicos y nos sintamos empujados al túnel oscuro y difícil de la injusticia y el sufrimiento鈥�, el Papa reivindica el llamado a 鈥渕antener el corazón abierto a la esperanza, confiando en Dios que se hace presente, nos acompaña con ternura, nos sostiene en la fatiga y, sobre todo, orienta nuestro camino鈥�.

Al recordar que la pandemia 鈥渘os arrastró en medio de la noche鈥� y mencionar algunas de sus consecuencias, Francisco concluye que 鈥渞ara vez los individuos y la sociedad avanzan en situaciones que generan tal sentimiento de derrota y amargura; pues esto debilita los esfuerzos dedicados a la paz y provoca conflictos sociales, frustración y violencia de todo tipo鈥�. En este sentido, acota que 鈥渓a pandemia parece haber sacudido incluso las zonas más pacíficas de nuestro mundo, haciendo aflorar innumerables carencias鈥�.

Un tiempo para cuestionarnos

Al cabo de tres años, el Sucesor de Pedro considera que 鈥渉a llegado el momento de tomarnos un tiempo para cuestionarnos, aprender, crecer y dejarnos transformar -de forma personal y comunitaria-; un tiempo privilegiado para prepararnos al 鈥榙ía del Señor鈥欌��, dice. Además, plantea una serie de preguntas para la reflexión e insiste en la urgencia de buscar y promover los valores universales que trazan el camino de esta fraternidad humana. Añade que, 鈥渄e esta experiencia, ha surgido una conciencia más fuerte que invita a todos, pueblos y naciones, a volver a poner la palabra 鈥榡untos鈥� en el centro鈥�.

Luego de la crisis sanitaria, Francisco observa que hemos sido testigos del inicio de 鈥渙tro azote鈥�, así lo llama. Alude a una nueva guerra, la guerra en Ucrania, 鈥渜ue se cobra víctimas inocentes y propaga la inseguridad, no sólo entre los directamente afectados, sino de forma generalizada e indiscriminada hacia todo el mundo; también afecta a quienes, incluso a miles de kilómetros de distancia, sufren sus efectos colaterales 鈥攂asta pensar en la escasez de trigo y los precios del combustible鈥�.

El Papa renueva su aliento a trabajar por la fraternidad

A partir de este contexto doloroso, el Papa se interroga: 鈥�¿Qué se nos pide, entonces, que hagamos?鈥�. Enseguida, exige comprometernos todos con la sanación de nuestra sociedad y nuestro planeta, 鈥渃reando las bases para un mundo más justo y pacífico, que se involucre con seriedad en la búsqueda de un bien que sea verdaderamente común鈥�. Y enumera una serie de acciones: retomar la cuestión de garantizar la sanidad pública para todos; promover acciones de paz para poner fin a los conflictos y guerras que siguen generando víctimas y pobreza; cuidar de forma conjunta nuestra casa común y aplicar medidas claras y eficaces para hacer frente al cambio climático; luchar contra el virus de la desigualdad y garantizar la alimentación y un trabajo digno para todos, apoyando a quienes ni siquiera tienen un salario mínimo y atraviesan grandes dificultades.

鈥淓l escándalo de los pueblos hambrientos nos duele. Hemos de desarrollar, con políticas adecuadas, la acogida y la integración, especialmente de los migrantes y de los que viven como descartados en nuestras sociedades鈥�, agrega el Obispo de Roma.

Mientras comparte sus reflexiones, el Papa espera que 鈥渆n el nuevo año podamos caminar juntos, atesorando lo que la historia puede enseñarnos鈥�. Expresa sus mejores votos a los jefes de Estado y de gobierno, a los directores de las organizaciones internacionales y a los líderes de las diferentes religiones. Por último, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, les desea un feliz año, en el que puedan construir, día a día, como artesanos, la paz. 鈥淨ue María Inmaculada, Madre de Jesús y Reina de la Paz, interceda por nosotros y por el mundo entero鈥�.