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El Papa: He venido como amigo, como hermano y como peregrino

El Papa se encuentra con una delegaci¨®n de ind¨ªgenas en Qu¨¦bec, y les expresa su admiraci¨®n, por su sentido de familiaridad y comunidad, que contrasta en un mundo ¡°lamentablemente¡± individualista.

Patricia Ynestroza - Pope

El Papa Francisco resaltó la importancia que da la comunidad indígena en cultivar bien el vínculo entre los jóvenes y los ancianos, custodiando una relación sana y armoniosa con toda la creación.

 ¡°La inmensidad de esta tierra lleva a pensar en el largo camino de sanación y reconciliación que estamos afrontando juntos. En efecto, la frase que nos ha acompañado desde marzo, desde que los delegados indígenas me visitaron en Roma, y que caracteriza mi visita aquí entre ustedes, es Caminar Juntos: Walking Together / Marcher Ensemble¡±.

a una delegación de indígenas presentes en Quebec, y que ha saludado en el Arzobispado. Les dijo que vino a Canadá como amigo, como hermano, como peregrino. Con espíritu penitencial, para expresarles el dolor que lleva en su corazón por ¡°el mal que no pocos católicos les causaron, apoyando políticas opresivas e injustas¡±.

El Papa un amigo y un hermano de las comunidades indígenas

Ha venido como amigo, para encontrarse con ellos, ¡°para ver, escuchar, aprender y apreciar cómo viven los pueblos indígenas de este país¡±. Ha venido como hermano, a descubrir en primera persona los frutos, buenos y malos, producidos por los miembros de la familia católica local a lo largo de los años.

¡°He venido como peregrino, con mis limitadas posibilidades físicas, para dar nuevos pasos adelante con ustedes y para ustedes; para que se prosiga en la búsqueda de la verdad, para que se progrese en la promoción de caminos de sanación y reconciliación, para que se siga sembrando esperanza en las futuras generaciones de indígenas y no indígenas, que desean vivir juntos fraternalmente, en armonía¡±.

Francisco, parte de la familia indígena canadiense

El Pontífice les manifestó que se devuelve a Roma mucho más enriquecido, porque lleva en el corazón el ¡°tesoro incomparable hecho de personas y de pueblos que le han marcado¡±, de rostros, sonrisas y palabras que permanecen en su interior; de historias y lugares que no podrá olvidar; de sonidos, colores y emociones que vibran fuertes en él.

¡°Realmente puedo decir que, durante mi visita, fueron sus realidades, las realidades indígenas de esta tierra, las que visitaron mi alma; entraron en mí y siempre me acompañarán. Me atrevo a decir, si me lo permiten, que ahora, en cierto sentido, yo también me siento parte de vuestra familia, y me siento honrado¡±.

Valioso sentido de comunidad

Para el Santo Padre, queda un recuerdo indeleble en su corazón cómo la comunidad indígena vive la fiesta de Santa Ana, ¡°junto a varias generaciones y a tantas familias indígenas¡±. Pero, sobre todo, alabó el hecho que, en un mundo tan individualista, cuánto valor adquiere ese sentido de ¡°familiaridad y de comunidad¡± tan genuino entre los indígenas. Y resaltó la importancia que dan en cultivar bien el vínculo entre los jóvenes y los ancianos, custodiando una relación sana y armoniosa con toda la creación.

Tres mujeres que pueden ayudar a alcanzar una reconciliación

Santa Ana, la Virgen María y santa Catalina Tekakwitha. Estas mujeres, dijo el Papa, pueden ayudar a unir, a volver a tejer una reconciliación que garantice los derechos de los más vulnerables y sepan mirar la historia sin rencores ni olvidos.

¡°Santa Ana, de quien pude sentir su ternura y protección, venerándola junto a un pueblo de Dios que reconoce y honra a las abuelas. En segundo lugar, pienso en la Santa Madre de Dios: ninguna criatura merece más que ella ser definida como peregrina, porque siempre, también hoy, también ahora, está en camino; en camino entre el cielo y la tierra, para cuidarnos por encargo de Dios y para llevarnos de la mano hacia su Hijo¡±.

Por último, señaló Francisco, "mi oración y mi pensamiento en estos días han ido frecuentemente a una tercera mujer de presencia afable que nos ha acompañado, y cuyos restos se conservan no lejos de aquí. Me refiero a santa Catalina Tekakwitha. La veneramos por su vida santa, pero, no podríamos pensar que su santidad de vida, caracterizada por una entrega ejemplar en la oración y el trabajo, así como por la capacidad de soportar con paciencia y dulzura tantas pruebas, también fue posible por ciertos rasgos nobles y virtuosos heredados de su comunidad y del ambiente indígena en el que creció", se cuestiona el Papa.


La Virgen María y santa Catalina, afirmó el Papa, recibieron de Dios un proyecto de vida y, sin preguntar a ningún hombre, dieron su ¡°sí¡± con valentía.

¡°Estas mujeres podrían haber respondido mal a todos los que se oponían a ese proyecto, o bien permanecer sujetas a las normas patriarcales de su tiempo y resignarse, sin luchar por los sueños que Dios mismo había impreso en sus almas. Pero no tomaron esa decisión, sino que con mansedumbre y firmeza, con palabras proféticas y gestos resueltos se abrieron camino y cumplieron aquello a lo que habían sido llamadas¡±.

¡°Que ellas bendigan nuestro camino común, que intercedan por nosotros y por esta gran obra de sanación y reconciliación tan agradable a Dios¡±, dijo por último Francisco.

Saludo del Santo Padre

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29 julio 2022, 16:55