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Gabriella Ceraso 鈥� Ciudad del Vaticano

Con palabras llenas de gratitud al Papa Francisco, Monseñor Fabio Dal Cin, Arzobispo Delegado Pontificio de Loreto, anunció ayer por la tarde la decisión pontificia de prorrogar hasta el 10 de diciembre de 2021 el Jubileo Lauretano concedido con ocasión del centenario de la proclamación por Benedicto XV de Nuestra Señora de Loreto Patrona de todos los aviadores.

"En este momento difícil para la humanidad -dice Monseñor Dal Cin- la Santa Madre Iglesia nos da otros doce meses para recomenzar desde Cristo, dejándonos acompañar por María, un signo de consuelo y esperanza segura para todos".

El Jubileo, iniciado oficialmente con la apertura de la Puerta Santa el 8 de diciembre de 2019, en presencia del Cardenal Secretario de Estado Pietro Parolin, pero "desgraciadamente no celebrado en toda su extensión a causa de la epidemia de Covid-19" - como leemos en el Decreto de la Penitenciaría Apostólica - renueva así por otros doce meses la experiencia de gracia y de perdón para todos los fieles que visitarán el Santuario Pontificio. Una gracia que también se extiende a las muchas capillas de los aeropuertos civiles y las bases de la fuerza aérea del mundo.

"Ciertamente los fieles -se lee en el Decreto firmado por el Cardenal Mauro Piacenza Penitenciario Mayor y el Regente Monseñor Christophorus Nykiel- sacarán de la generosa prórroga buenos propósitos y el vigor espiritual para obrar en la vida según la ley del Evangelio".

Al dar la noticia de la prórroga al final del rezo del Santo Rosario de la Vigilia de la Asunción desde el Santuario de la Santa Casa de Loreto, Monseñor Dal Cin recordó las numerosas veces durante el año, en las que el Papa expresó su cercanía al Santuario: en su visita del 25 de marzo de 2019, donde firmó la Exhortación Apostólica a los Jóvenes Christus Vivit; en la concesión y prórroga del Jubileo Lauretano; en la inscripción el 10 de diciembre en el calendario romano de la memoria facultativa de la Santísima Virgen de Loreto, y finalmente con la inclusión en las Letanías Lauretanas de tres nuevas invocaciones Mater Misericordiae, Mater Spei y Solacium migrantium.