脕苍驳别濒耻蝉 del Papa: Ver a Jes煤s en el rostro del pobre
Pope
Al comentar el Evangelio del XXI domingo del tiempo ordinario 鈥� San Mateo, capítulo 16, versículos del 13 al 20 鈥� y que presenta el momento en el que Pedro profesa su fe en el Señor como Mesías e Hijo de Dios, el Papa comenzó explicando que el mismo Jesús provoca esta confesión mediante un camino de educación de su fe, que comienza con una pregunta dirigida a los Apóstoles: 鈥�¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del hombre?鈥�. A lo que agregó:
鈥�¿Quién dicen que soy yo?鈥�
Teniendo en cuenta que Jesús, básicamente, era considerado un profeta, Francisco explicó que con la segunda pregunta, el Señor los toca directamente: 鈥�¿Quién dicen que soy yo?鈥�. De manera que cada uno de los interpelados es llamado a involucrarse, manifestando el motivo por el que sigue a Cristo; lo que incluye la legitimidad de cierta vacilación.
El Santo Padre prosiguió explicando que esta respuesta 鈥渢an luminosa鈥�, 鈥渆s fruto de una gracia especial del Padre celestial鈥�, tal como el mismo Jesús lo confirma al decirle:
Y al reconocer la correspondencia de Simón con la inspiración de la gracia, Jesús le responde con tono solemne: 鈥淭ú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella鈥�. Afirmación con la cual el Señor hace entender a Simón el sentido del nuevo nombre que le ha dado, 鈥淧edro鈥�:
La fe es vida: una respuesta no teórica
Francisco afirmó además que Jesús dirige hoy esta pregunta a cada uno, como a los primeros discípulos, para dar una respuesta no teórica, sino que involucra la fe, es decir la vida, 鈥�¡porque la fe es vida!鈥�. A lo que agregó que se 鈥渢rata de entender quién es Cristo para nosotros鈥�, es decir, 鈥渟i Él es el centro de nuestra vida y el fin de todo nuestro compromiso en la Iglesia y en la sociedad鈥�.
La vía maestra de la perfección
El Santo Padre recordó: 鈥淓s indispensable y loable que la pastoral de nuestras comunidades esté abierta a las muchas pobrezas y emergencias鈥�, porque la caridad es siempre la vía maestra de la perfección.
La caridad cristiana no es simple filantropía
En efecto, como dijo el Papa al concluir, 鈥渓a caridad cristiana no es simple filantropía鈥�, sino 鈥渕irar al otro con los mismos ojos que Jesús鈥� y 鈥渧er a Jesús en el rostro del pobre鈥�. Antes de rezar la antífona mariana Francisco terminó diciendo:
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