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Renato Martinez 鈥� Ciudad del Vaticano

鈥淨ueridos hermanos y hermanas, seguimos con la catequesis sobre el 鈥楶adre nuestro鈥� y lo hacemos observando que esta oración se centra en la palabra: 鈥�Abba, Padre鈥�. Esta expresión es tan importante para los cristianos que se ha conservado en su forma original, escuchando en ella la misma voz de Jesús鈥�, lo dijo el Papa Francisco en la Audiencia General del tercer miércoles de enero de 2019, continuando con su ciclo de catequesis dedicadas a la oración del Padre Nuestro.

El Espíritu nos hace hijos adoptivos

El Santo Padre comentando el pasaje de la Carta de San Pablo a los Romanos (8,15), en el que el apóstol dice que, 鈥渉emos recibido el Espíritu que nos hace hijos adoptivos, por medio del cual gritamos: ¡Abba! ¡Padre!鈥�. Ese mismo Espíritu, precisa el Pontífice citando la Carta a los Gálatas (4,6), habita en nuestros corazones y clama: ¡Abba! ¡Padre! 鈥淓sta invocación 鈥� señala el Papa 鈥� se presenta dos veces y en ella se condensa toda la novedad del Evangelio. Después de haber conocido a Jesús y escuchado su predicación, el cristiano ya no considera a Dios como un tirano temible, ya no tiene miedo de Él, sino que siente que la confianza en Él florece en su corazón: puede hablar con el Creador llamándolo 鈥楶adre鈥�. La expresión es tan importante para los cristianos que a menudo se ha conservado intacta en su forma original: Abba鈥�.

La radical novedad de la oración cristiana

Asimismo, el Papa Francisco explica que, es raro que en el Nuevo Testamento las expresiones arameas no se traduzcan al griego. Debemos imaginar, agrega el Pontífice, que en estas palabras arameas se haya quedado como 鈥済rabada鈥�, la voz del mismo Jesús. Y esta es la novedad radical de la oración cristiana. 鈥淣o se trata sólo de usar un símbolo 鈥� la figura del padre, precisa el Papa 鈥� que relacionar al misterio de Dios; en cambio, se trata de tener, por así decir, todo el mundo de Jesús decantado en el propio corazón. Si llevamos a cabo esta operación, podemos rezar con verdad el 鈥楶adre Nuestro鈥�. Decir 鈥楢产产补鈥� 鈥� puntualiza el Pontífice 鈥� es algo mucho más íntimo y conmovedor que simplemente llamar a Dios 鈥楶adre鈥�. Por eso alguien sugirió traducir la palabra aramea original 鈥楢产产补鈥� con 鈥楶apá鈥� o 鈥榩apito鈥�. Con el corazón estamos invitados a decir Papá y a tener una relación con Dios como aquel de un niño con su padre鈥�.

Un Padre que sólo conoce el amor

Además, el Santo Padre señala que, son los Evangelios los que mejor nos presentan el sentido de esta palabra. El 鈥淧adre Nuestro鈥� adquiere sentido y color si aprendemos a rezarlo después de leer la parábola del Padre misericordioso. 鈥淚maginemos esta oración pronunciada por el hijo pródigo, después de haber experimentado el abrazo de su padre que lo había estado esperando durante mucho tiempo, un padre que no recuerda las palabras ofensivas que le dijo, un padre que ahora simplemente le hace entender cuánto lo extrañaba. Entonces descubrimos cómo esas palabras cobran vida y adquieren fuerza. Y nos preguntamos: ¿es posible que tú, oh Dios, sólo conozcas el amor? ¿Tú no conoces el odio? No 鈥� respondería Dios 鈥� yo conozco sólo el amor. ¿Dónde está en ti la venganza, el reclamo de justicia, la ira por tú honor herido? Y Dios respondería: yo sólo conozco el amor鈥�.

Orar es simplemente decir Abba

Finalmente, el Papa Francisco señala que, Dios te busca, aunque si tú no lo buscas. Dios te ama, aunque lo hayas olvidado. Dios ve una belleza en ti, incluso si piensas que has desperdiciado todos tus talentos innecesariamente. Dios es no sólo Padre, es como una madre que nunca deja de amar a su criatura. 鈥淧uede ser que nosotros también caminemos por senderos alejados de Dios, como le sucedió al hijo pródigo; o caigamos en una soledad que nos hace sentir abandonados en el mundo; o, de nuevo, errar y ser paralizados por un sentido de culpabilidad. En estos tiempos difíciles, todavía podemos encontrar la fuerza para orar, empezando por la palabra 鈥楶adre鈥�. Recuerde bien esto 鈥� afirma el Papa 鈥� si alguien tiene cosas feas dentro de sí y que no sabe cómo resolverlas se dirija a Dios y le diga Padre y Él te responderá. No nos ocultará su rostro, no se cerrará en silencio: nos dirá que nunca nos ha perdido de vista鈥�.

No se cansen de llamarlo 鈥淧adre鈥�

Antes de concluir su catequesis, el Santo Padre saludando cordialmente a los peregrinos de lengua española venidos de España y Latinoamérica le dijo: 鈥淟os animo a dirigirse a Dios como un Padre que nos ama y que sale a nuestro encuentro. No se cansen de llamarlo; porque él como Padre bueno viene a sanar nuestras heridas y a restablecer la alegría de ser sus hijos鈥�.