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Al menos 50 personas han muerto en el campo de refugiados de Jabaliya, en el norte de la Franja de Gaza. La cifra ha sido confirmada por el Ministerio de Sanidad, que ha corregido un comunicado inicial que hablaba de cientos de muertos y más de 150 heridos. Ayer, martes 31 de octubre, Israel lazó seis bombas a lo largo de toda una hilera de edificios. Al menos veinte quedaron destruidos, según testigos en el lugar de los hechos. Según las autoridades de Hamás, el hospital indonesio de Beit Lahia dejó de funcionar debido a la escasez de combustible necesario para mantener operativo el generador eléctrico. Por su parte, el ala militar de Hamás anunció este miércoles que siete rehenes, entre ellos "tres titulares de pasaportes extranjeros", habían muerto en el bombardeo israelí del campo de refugiados de Jabaliya.

Egipto recibe heridos y extranjeros

Hoy, cientos de palestinos y extranjeros heridos salían de la Franja de Gaza, sometida a constantes bombardeos israelíes, a través de la terminal fronteriza egipcia de Rafah, la primera vez que esto ocurre desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás, el 7 de octubre. Según un funcionario fronterizo egipcio, las primeras ambulancias con más de 88 heridos pudieron entrar en Egipto hacia las 09.30 GMT.

Igualmente, las autoridades egipcias anunciaron su apertura excepcional para permitir la entrada de cerca de 500 extranjeros, en su mayoría palestinos con doble nacionalidad. 

Unicef: Gaza es un cementerio para miles de niños

Hasta ahora han muerto más de 8 mil 500 personas, entre ellas más de 3.500 niños, hasta el punto de que Unicef, la agencia ONU para la infancia, habla de Gaza como "un cementerio para miles de niños y un infierno para todos los demás". Al menos 67 empleados del OOPS, el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina, murieron, 22 resultaron heridos y 44 estructuras quedaron destruidas, incluidas algunas escuelas.

Continúa la identificación de víctimas israelíes

En Israel, mientras tanto, continúa la identificación de los cuerpos de las víctimas civiles del ataque de Hamás del 7 de octubre, el 85% del total, mientras que por el momento se confirma que 350 soldados israelíes murieron al contrarrestar el ataque islamista. Desde Gaza, mientras tanto, Hamás disparó cohetes hacia la cercana ciudad de Ashdod, hiriendo a cuatro personas, una de ellas de gravedad. Los rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán, también lanzaron drones contra Eliat, en el sur del país, y amenazaron con continuar los ataques.

Blinken: Sin ayuda el conflicto se extenderá

En una situación de emergencia humanitaria que se mantiene constante, el Ministerio de Defensa israelí anunció la llegada de 80 camiones de ayuda a través del paso fronterizo de Rafah, en la frontera con Egipto. "Sin una ayuda humanitaria rápida y sostenida, es mucho más probable que el conflicto se extienda", declaró el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en el pleno del Senado, "el sufrimiento aumentará y Hamás y sus patrocinadores se beneficiarán presentándose como salvadores de la desesperación que han creado".