á, los trabajadores también se unen a la protesta
Amedeo Lomonaco - Ciudad del Vaticano
Las protestas no cesan en Irán, y los dramáticos enfrentamientos han sacudido la ciudad de Sanandaj, capital de la provincia del Kurdistán iraquí, de donde era originaria Mahsa Amini, la muchacha detenida por no llevar correctamente el velo. En la capital, Teherán, siguen alzándose voces de protesta, y en las redes sociales se difundieron imágenes de estudiantes coreando consignas en la Universidad de Ingeniería Amirkabir. También se registran nuevas sentadas de estudiantes en las regiones del norte del país. Los trabajadores del sector petrolero también están expresando su disconformidad. En las últimas horas, se ha detenido la producción en varios yacimientos de crudo en diversas partes de Irán. El "Council of Oil Contract Workers" informó de que más de 4.000 trabajadores se sumaron a la huelga. Entre ellos había empleados de las refinerías de Abadan, en el oeste, y de Kengan, en el sur del país. En noviembre de 1978, la movilización de los trabajadores de la industria petroquímica, junto con la de los estudiantes, permitió el derrocamiento del Sha.
Los niños también son víctimas de la represión
Mientras tanto, el gobierno iraní reitera que la muerte de Mahsa Amini está relacionada con una dolencia previa. Sin embargo, la familia informa de que el cuerpo de la joven presentaba moratones y otros signos de golpes. También continúa la represión policial en todo el país. Según los activistas, 185 personas han muerto desde que comenzaron las protestas. Entre ellos, al menos 19 son menores. Unicef, en un comunicado, pide "proteger a todos los niños de cualquier forma de violencia y peligro, incluso durante los conflictos o acontecimientos políticos". La violencia contra los niños, por parte de cualquiera y en cualquier contexto, es indefendible". "Nos unimos - subraya Unicef - al llamamiento del Secretario General de la ONU para que las autoridades se abstengan de hacer un uso innecesario o desproporcionado de la fuerza. Los niños y adolescentes deben poder ejercer sus derechos de forma segura y pacífica en todo momento".
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