La Diócesis de Ourense en 貹ñ es pionera en energía verde
Mireia Bonilla – Ciudad del Vaticano
La Diócesis de Ourense se convierte en pionera entre las Diócesis españolas en su firme apuesta por las energías renovables, desafío al que exhorta el Papa Francisco en su Encíclica Laudato si´ tanto a las personas como a las comunidades para “cuidar nuestra Casa Común” a través de acciones y decisiones concretas que supongan caminar hacia otro estilo de vida más ecológico. “Hemos optado por hacer un Convenio-Marco para ir introduciendo en distintas instituciones de la Diócesis de Ourense a través de una compañía que es orensana y que se llama SolGaleo, para que las energías que se utilicen en las actividades de la Iglesia sean completamente renovables, lo que se llama energía verde” explica el Delegado de Economía de la Diócesis de Ourense, Don Raúl Alfonso, matizando que la idea de la Diócesis es “intentar que la energía que genera la Iglesia sea lo más ética posible”.
Dicho convenio ya ha posibilitado el cambio de suministro para la utilización de energía verde en 50 edificios, centros y dependencias de la Diócesis de Ourense, entre los que se encuentran el Obispado, la Catedral, la Casa Sacerdotal, la Casa de Ejercicios, el Centro de Conservación y Restauración San Martín, varias rectorales y varias parroquias, con la idea de que paulatinamente se vayan incorporando todas ellas: “la idea es llegar a todas las parroquias de la Diócesis siempre y cuando sus párrocos lo consideren también oportuno y les coincida con su forma de administrar la parroquia, pero teniendo siempre en cuenta el criterio ético que nos mueve a actuar así” asegura el Delegado de Economía de la Diócesis española.
La Diócesis de Ourense ha optado por la energía fotovoltaica a través de paneles solares para sus edificios: “La energía que suministra esta empresa garantiza que el 100% es energía verde, energía ecológica” afirma Don Raúl, a la vez que explica que “están en marcha distintos proyectos que la propia empresa SolGaleo estudia, presenta y sin un coste añadido nos va a permitir que los edificios más representativos en los que sea posible, también por condiciones de tipo patrimonial, se pueda generar la mayor parte de energía propia”.
Una conversión posible
Esta conversión también ha sido posible gracias al cambio de legislación que se produjo en el año 2019 en España en el que se aprobó el Real Decreto 244/2019 del 5 de abril, por el que se favorece o se eliminan muchas trabas que tenían que ver con el autoconsumo (entendido como la posibilidad de un consumidor para generar en su entorno - de no más de 500 metros - la energía que necesita en función de los condicionamientos que tenga ese sitio, de los hábitos de consumo y de las posibilidades que tenga tanto de radiación solar y de viento y de la ubicación de su vivienda) explica para Pope Germán Rodríguez-Saá, Fundador y Presidente de SolGaleo.
Germán señala que España "es un país con muchos recursos eólicos y solares", pero es desde hace relativamente poco que está recorriendo el camino de las energías renovables, como demuestra la comparación con otros países europeos: "Aunque tenemos instalada una potencia de autoconsumo fotovoltaico de unos 6 GW, en Alemania tienen casi 60 GW. Es paradójico que un país que aparentemente tiene menos sol, tenga mucha más instalación fotovoltaica".
En cambio, en los últimos años, gracias a una serie de concursos se ha reactivado de nuevo el mercado energético renovable, en lo que tiene que ver con instalación, generación y autoconsumo. “Hemos avanzado en estos dos últimos años de una manera importante porque se han eliminado trabas y se han publicado decretos y subasta que han favorecido la instalación de nuevos megavatios eólicos y fotovoltaicos y las expectativas son bastante buenas” expresa el Fundador de SolGaleo.
El compromiso económico y la casa común
El Delegado de economía de la Diócesis explica que cuando se hace un estudio de las distintas posibilidades que hay de mejorar los suministros de todo tipo de productos en las instituciones de la Iglesia, “se estudia el sector económico, por supuesto, pero cualquier sector económico con la vida de Iglesia tiene que ver también con el sector moral”. La Diócesis de Ourense con esta iniciativa pretende responder al llamado del Papa Francisco en su Encíclica Laudato si’, pues – tal y como asegura Don Raúl – “El cuidado de la Casa Común es muy importante a la hora de tomar decisiones de tipo económico y administrativo, en este caso sin perjudicar realmente la economía de la Iglesia y de la Diócesis”.
“Garantizamos que sea un gesto social de que la Iglesia está comprometida con el cuidado de la Casa Común, con el cambio climático y con todo lo que lleva consigo preocuparnos de que este mundo en el cual nos movemos y vivimos que no solamente lo dejemos igual sino un poquito mejor para aquellos que vengan detrás, porque la cuestión es bastante urgente” dice Don Raúl.
Los tiempos de la iniciativa
Por su parte, el Fundador de SolGaleo señala que el tiempo de amortización y lo caro o barato que es la inversión de las energías renovables depende de la curva de carga del cliente, es decir, de los hábitos de consumo. El más rentable en este momento – dice – “es sin baterías”. Germán asegura que la inversión se amortiza más aceleradamente “cuando hacemos coincidir los periodos de consumo con los periodos de generación. Por ejemplo: si yo tengo un cliente específico que tiene sus hábitos de consumo en determinadas horas del día, en los días de verano, o en los meses desde mayo a septiembre, su instalación se amortiza de una manera mucho más acelerada que aquel que consume en invierno, donde la eficiencia del panel es mucho menor y donde tenemos más dificultad de empatar la generación y el consumo”.
Las ventajas de la energía verde
“La instalación de paneles solares es tremendamente rápida y tremendamente segura” señala Germán de Solgaleo. De hecho – dice – “una de las ventajas que tiene la tecnología solar es que es modular, es decir, puedes incrementar la potencia según tus necesidades y puedes ir instalándola poco a poco como un puzle de una manera muy segura y muy eficaz”.
Por último, Germán asegura que el mantenimiento es sencillo:” fundamentalmente el éxito de las instalaciones solares de autoconsumo, que es el caso de la diócesis de Orense, es un mantenimiento que deriva en una monitorización de que los paneles funcionen día día y eso se hace en remoto con todo el software y luego el mantenimiento preventivo anual donde será la limpieza de los paneles y poco más. En el caso de que haya alguna incidencia puntualmente durante el año, se hace un mantenimiento correctivo que es tremendamente sencillo”.
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