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Ciudad del Vaticano

“Renuncio a mi cargo de Presidente para que Mesa y Camacho no sigan persiguiendo a dirigentes sociales”, lo dijo Evo Morales la tarde de este domingo 10 de noviembre, a través de una conferencia de prensa televisiva, en el que anunció su salida del gobierno, junto a su Vicepresidente, Álvaro García Linera, y aseguró que su gobierno vivió “un golpe político, cívico y policial”.

“Tengo la obligación de buscar la paz”

El Mandatario al justificar su decisión de abandonar la presidencia y frenar la escalada de violencia que se viene desarrollando en el país expresó que, “tiene la obligación de buscar la paz”, ya que para “frenar la violencia” que se agita desde hace semanas, es necesario su renuncia bajo presión militar, policial y cívica, hecho que imitaron su Vicepresidente y los líderes de Diputados y del Senado, por lo que la nación quedó acéfala. Asimismo, según las agencias locales, Morales justificó su decisión en las persecuciones ejercidas por los opositores Carlos Mesa, candidato presidencial del partido Comunidad Ciudadana (CC), que salió segundo en las elecciones, y Luis Fernando Camacho, el titular del Comité pro Santa Cruz.

El informe de la OEA

La renuncia del Presidente Morales es el epilogo de una serie de eventos que se dieron a partir de la publicación del informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el mismo que aseguró en su reporte preliminar que en los resultados de las elecciones del pasado 20 de octubre es “improbable estadísticamente” que Morales haya ganado los comicios electorales como él aseguraba. Tras la publicación de este informe, el Presidente Morales anunció la mañana de este domingo nuevas elecciones generales y la renovación del Tribunal Supremo Electoral, pero las presiones policiales, militares y cívicas finalmente lo forzaron a renunciar.

Procedimientos para nuevas elecciones

La OEA también indicó que en las próximas horas la Asamblea Nacional de Bolivia establecerá los procedimientos para la renovación del TSE, informaron agencias locales. Según la Constitución Política del Estado (CPE) establece en su artículo 169 que, “en caso de impedimento o ausencia definitiva del presidente o presidenta de Estado, será reemplazado/a por la v vicepresidenta o el vicepresidente y, a falta de ésta o éste, por la presidenta o el presidente del Senado, y a falta de ésta o éste por la presidente o el presidente de la Cámara de Diputados. En este último caso, se convocarán nuevas elecciones en el plazo máximo de noventa días”. En ausencia de los presidentes de ambas cámaras, el vicepresidente del Senado o el decano de ese cuerpo (el legislador de mayor edad) debe dirigir ese trámite. Otra opción es un gobierno de consenso interino hasta el llamado a nuevas elecciones.