Obispos de Venezuela condenan la campaña de represión y persecución del gobierno
Pope
En un nuevo comunicado, los obispos de la Conferencia episcopal de Venezuela califican de “moralmente inaceptable” que el Consejo Nacional electoral no haya dado los resultados de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, desconociendo la soberanía popular manifestada con el voto y condenan la sucesiva represión de diversos órganos del Estado contra la población, con la detención y encarcelamiento de miles de venezolanos, incluso menores de edad, así como la persecución de testigos de mesa, periodistas y dirigentes políticos, incluyendo al candidato opositor, Edmundo González Urrutia, sobre quien pende un mandato de arresto.
El emitido por la presidencia del episcopado venezolano a poco más de 30 días de los comicios presidenciales, reitera en tres puntos, la preocupación por los acontecimientos que han llevado a un clima de “inquietud y zozobra de amplios sectores de la población”, comenzando por la falta de transparencia en la presentación de los resultados de los comicios como está previsto por las leyes.
“Otro gran motivo de preocupación sobre la efectiva vigencia de la democracia venezolana – se lee en la nota - lo constituye la promoción por parte de diversos órganos del Estado de una campaña de represión y persecución que se traduce en miles de detenidos, entre los que se encuentran muchos menores de edad, a los que se les pretende imputar, sin cumplir el debido proceso, delitos muy graves”.
En particular, los obispos condenan “la persecución a la que se ven sometidos testigos de mesas, comunicadores sociales, el candidato con mayor número de votos y dirigentes de la oposición”, pues contradicen los principios de pluralidad política e independencia de los poderes públicos garantizados por la Constitución.
En efecto, las detenciones arbitrarias y masivas de personas que en el ejercicio de sus derechos ciudadanos se han manifestado contra la decisión del CNE de anunciar la reelección del presidente Nicolás Maduro, han provocado la condena por parte de la sociedad civil y defensores de derechos humanos a nivel nacional e internacional. A esto se suma la decisión de la Fiscalía general que, el pasado 2 de septiembre, solicitó una "orden de aprensión" en contra del candidato opositor Edmundo González Urrutia, por seis cargos, entre ellos, el de terrorismo y usurpación de funciones.
Los obispos reiteran que todas estas acciones en nada contribuyen a “la sana convivencia ciudadana” y, por el contrario, obstaculizan gravemente la superación de los “grandes problemas y necesidades que nos afectan como nación”.
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