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Stefanie Stahlhofen - Ciudad del Vaticano

En el parvis de la Plaza de San Pedro para la audiencia general de este miércoles 17 de abril también estuvo sentada Kristina Kühnbaum-Schmidt, presidenta del Comité Nacional Alemán de la Federación Luterana Mundial y obispa regional de la Iglesia Evangélica Luterana del Norte de Alemania. Que se encuentra en Roma, del 15 al 17 de abril, Kühnbaum-Schmidt y estuvo acompañada por el director general, Norbert Denecke, y el relator para cuestiones teológicas y ecuménicas fundamentales de la DNK/FLM, Oliver Schuegraf. Al final de la audiencia, pudieron saludar al Papa Francisco e intercambiar brevemente algunas reflexiones, con especial mención al cuidado de la creación, un tema muy cercano al obispo Kühnbaum-Schmidt, representante de la EKD para la responsabilidad por la creación y partidario de la idea de incluir la fiesta de la creación en el calendario litúrgico de todas las Iglesias cristianas. Un tema, este último, discutido recientemente en un encuentro ecuménico en Asís como una "gran oportunidad para profundizar más en la teología y la espiritualidad de la creación".

Kristina Kühnbaum-Schmidt, usted asistió a la audiencia general del Papa Francisco y después tuvo la oportunidad de conocerlo brevemente en persona. ¿Cómo fue el encuentro?

En primer lugar, me conmovió mucho la atención con la que el Papa Francisco me escuchó, su disponibilidad y la gran amabilidad con la que condujo esta conversación.

¿De qué han hablado?

Llevé al Papa los saludos de los cristianos luteranos de Alemania y le agradecí que muchos se sientan unidos a él en su gran y convencido compromiso con la integridad de la creación y la justicia climática. Recordé también que en este momento es muy importante para nosotros los cristianos de todo el mundo y que estemos unidos en nuestro compromiso por la paz. También pude decirle cuánto nos preocupan los cristianos, especialmente en nuestro país, los fieles luteranos, pero también nuestros demás hermanos y hermanas, para que sigamos avanzando hacia la unidad mutua.

En los últimos días usted ha mantenido otras conversaciones en Roma y en el Vaticano. Se reunió, por ejemplo, con el cardenal Kurt Koch, Prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos. ¿Cómo fueron estas reuniones? ¿Se están logrando avances en cuanto a la unidad de los cristianos?

Todas las conversaciones tienen como objetivo garantizar que se sigan logrando avances. Y todo diálogo es un buen paso, lo que significa que discutimos bien entre nosotros, intercambiamos ideas y todos esperamos que siempre haya entre nosotros un entendimiento más profundo, una comunión cada vez mayor y también signos de unidad visible.

En 2016, el Papa Francisco viajó a Suecia para conmemorar la Reforma y también se reunió con la Federación Luterana Mundial. ¿Qué ha cambiado realmente en el ecumenismo desde entonces?

La comunión en Lund fue un signo y un impulso muy importante para dar nuevos pasos juntos en comunión. Seguimos en este camino.

¿Cuáles son sus esperanzas para el futuro?

Que continuemos en el camino de una comunión más profunda y también de más diálogos ecuménicos y discusiones doctrinales, y que también participemos en un diálogo intenso sobre las diferencias y, esperemos que pronto, también sobre puntos en común en cuestiones doctrinales.