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Silvonei José – Pope - Aparecida

La más grande Conferencia Episcopal del mundo se reunió en la capital mariana de la fe durante 10 días para orar, reflexionar y debatir en torno al tema central - La realidad de la Iglesia en Brasil y la actualización de sus Orientaciones Generales para la Acción Evangelizadora - y otras cuestiones en 27 sesiones, durante la 61ª Asamblea General de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil.

Tres temas prioritarios: Sínodo de los Obispos 2021-2024; Jubileo 2025 y Juventud. También fueron asuntos tratados los estatutos de la Conferencia (Doctrina de la Fe, Liturgia, Informe Anual de la Presidencia, Informe Económico, Textos Litúrgicos - CETEL).

El número de obispos en el país es de 482, de los cuales 316 ejercen el gobierno pastoral de una Iglesia particular (diócesis y archidiócesis) y otros 166 son obispos eméritos.

Cada obispo aportó sus experiencias pastorales, sus logros y sus dificultades para compartirlas con los demás. Entre las sesiones plenarias, las reuniones y los debates sobre temas importantes para la Iglesia católica y la sociedad, los obispos participaron también en un retiro y en una celebración ecuménica.

La Asamblea comenzó con la participación del secretario de Estado Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, que dirigió el retiro de los obispos de Brasil sobre el tema: "El Camino Sinodal" y las meditaciones sobre "Comunión, Participación y Misión". También estuvo presente el presidente de la Conferencia Episcopal de Burkina Faso y Níger, Mons. Laurent Dabiré, que habló sobre la tragedia del terrorismo en su país.

Durante estos días de trabajo, los obispos brasileños experimentaron la metodología "Conversaciones en el Espíritu", llevada a cabo en mesas sinodales para discernir las decisiones de la Iglesia en Brasil, en la línea del Sínodo de los Obispos que se celebrará en octubre de 2023 y que continuará el próximo octubre en el Vaticano. Los prelados divulgaron cuatro mensajes (al Papa, al Prefecto del Dicasterio para los Obispos, al pueblo brasileño y al pueblo católico). Todos los días se reunieron con periodistas en ruedas de prensa sobre los temas tratados en la Asamblea.

Desde hace 13 años, el Santuario Nacional acoge la principal reunión de la más grande Conferencia Episcopal del mundo, con una estructura completa y sesiones celebradas en el Centro de Eventos Padre Vítor Coelho.

Diversos sectores de la Casa de la Madre y de la CNBB trabajaron con gran fe y dedicación durante los días de la Asamblea General, mostrando que la Reina y Patrona de Brasil intercede por cada uno de nosotros y también por los 486 obispos y devotos de Aparecida, para tomar decisiones importantes para la Iglesia en el país.

En declaraciones a A12, Don Jaime Spengler, presidente de la Conferencia Nacional de Obispos Brasileños, dijo:

"¡En la Casa de la Madre hay cariño, hay ternura! Esto es fuente de alegría y satisfacción, pero la Madre también nos repite: 'Hagan lo que mi Hijo les diga'. La Madre es Intercesora, y eso resuena de una manera muy especial y nos inspira en estos días aquí en el Santuario Nacional de Aparecida".

Ahora los obispos regresan a sus diócesis llevando el calor y la esperanza de este encuentro en la Casa de la Madre, un encuentro que el próximo año dará las directrices para el camino futuro de nuestra Iglesia Católica en Brasil.