ʲԲá: Colegios católicos firman protocolo de prevención de abusos
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“Como Iglesia, humildemente tenemos que pedir perdón por las víctimas que se han podido crear en algunos de nuestros ambientes”. Lo ha expresado Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, arzobispo de Panamá, en ocasión de la firma del convenio compromiso de Protocolo de Prevención y Atención del Abuso al Menor de Edad. Ocurrió luego de la santa misa celebrada en el Día de la Educación Católica, el 16 de agosto, en la memoria del natalicio de San Juan Bosco.
Según informa la Arquidiócesis de Panamá, este texto fue suscripto por los directores de los colegios católicos que forman parte de la Federación de Educación Católica de Panamá (FECAP). Han aumentado las cifras de casi 400 abusadores sexuales en la nación, capturados en lo que va del año 2023.
El papel de la Iglesia es generar protocolos para que en nuestros lugares sean cada vez más sanos y así poder proteger a los menores de edad, subrayó el arzobispo. Ulloa se pueda replicar en todas las instituciones. Asimismo, reiteró: “Tolerancia cero, nuestra postura como Iglesia sobre el abuso al menor y considera que deben existir leyes mucho más fuertes a esas realidades del menor de edad”.
Otro de los objetivos es la prevención, de poder educar y darles las herramientas de defensa a los niños y jóvenes sobre esta realidad que los puede acechar, no solo en los colegios, sino en su ambiente familiar y en su comunidad.
El Prelado enfatizó la formación de buenos ciudadanos que respondan a las transformaciones de nuestras realidades a través de los valores humanos como uno de los compromisos de la educación católica en el país.
De acuerdo con el Hermano Francisco Velázquez, director general del Colegio La Salle, la firma de este convenio es un compromiso como docentes e Iglesia a través de la educación católica de cuidar, prevenir y fomentar el respeto hacia los menores de edad.
Por su parte, Gabriel Campos, quien es estudiante del colegio Saint Mary en Panamá Oeste, manifestó su aprecio por la determinación de la Iglesia de luchar contra la pedofilia, “para que como niños y jóvenes nos sintamos seguros en nuestra propia escuela; esta es la seguridad más grande que uno tiene”.
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