CEE: Presentada Instrucción sobre abusos a menores e Informe "Para dar luz"
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Es el primer documento emanado por una Conferencia Episcopal en todo el mundo que unifica y tiene vigencia para toda la Iglesia en España, evitando la proliferación de normas particulares y se refuerzan las garantías jurídicas. Aprobado durante la Asamblea Plenaria del Episcopado de abril de 2023 y presentado el 1º de junio, la instrucción pone en el centro la protección de los denunciantes, sin perjuicio para los derechos de todas las partes. Este texto se actualiza con las disposiciones establecidas en el motu proprio Vos estis lux mundi del Papa Francisco, que fue confirmado el 25 de marzo de 2023.
La Conferencia Episcopal Española (CEE) señala que “las reciben los testimonios y se llevan a cabo los primeros pasos, entre ellos, el asesoramiento y guía de posibles procedimientos judiciales”. Asimismo, este marco prevé ofrecer acompañamiento espiritual, médico y psicológico al denunciante. A su vez, amplía la comunicación con víctimas y denunciantes en los distintos momentos procesales, para hacer valer los derechos que les correspondan.
Con esta instrucción, se recoge en un solo documento toda la normativa canónica vigente que regula la actuación eclesial y la comunicación de los hechos a las autoridades civiles. En particular, se aclaran los períodos de prescripción de delitos, las modificaciones legislativas de estos años y se refuerza el principio de escritura para garantizar todo el proceso.
Como bien aclara la CEE, estas instrucciones refuerzan el Derecho Penal, pero no lo sustituyen. Es más, se insiste en la obligación de los obispos, sacerdotes y miembros consagrados de colaborar con la justicia penal de cada Estado, incluida la denuncia y testificación durante el proceso.
También explicita la obligación de colaborar con la Fiscalía. Esto implica que, si durante la investigación se obtienen pruebas o indicios racionales de la comisión de un delito, el superior del lugar está obligado a informar a la Fiscalía.
Primer informe sobre la pederastia en la Iglesia en España que se presenta en público
Además de las instrucciones, la CEE dio a conocer el informe “Para dar luz”, cuya estructura y contenido pretende ofrecer todos los elementos necesarios para comprender la situación sobre la pederastia. Es el primer reporte de este asunto en la Iglesia española que se presenta en público. El documento recopila toda la información recibida en la Conferencia Episcopal y que se ha podido contrastar con las distintas fuentes.
¿Cómo está estructurado el informe?
El estudio está articulado en siete volúmenes, tiene una parte documental y otra informativa que se va actualizando constantemente. La parte documental recoge todos los protocolos que se han redactado en los tres últimos años por las instituciones eclesiales de ámbito nacional, congregaciones religiosas y diócesis. En su elaboración han participado un conjunto de expertos, entre ellos en pedagogía y en psicología.
La parte informativa compendia toda la normativa canónica para la actuación de la Iglesia en el campo relativo a los abusos sexuales y explica los principios desde los que se actúa.
La tercera parte de “Para dar luz” compila los casos conocidos a través de las Oficinas de Protección de Menores hasta la fecha. De acuerdo con la CEE, “es la parte viva del informe”, pues se irá actualizando según se vayan recabando nuevos datos.
Algunas cifras
En total, 927 víctimas han presentado testimonios sobre 728 victimarios que cometieron abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia católica. En relación al sexo, aunque sus agresores son en más del 99% varones, las víctimas son varones en el 82,62% de los casos y mujeres en el 17,38% de los casos.
En cuanto a la pertenencia a la Iglesia, de los 728 victimarios, la mayoría, 378, son clérigos, lo que supone el 52%. Además, hay 208 religiosos (o religiosas) no ordenados sacerdotes, 92 laicos. También hay 23 testimonios en los que el denunciante no supo la condición eclesial del agresor, o un diácono.
En aquellos victimarios en que las víctimas conocen su situación vital, el 63,60% de los victimarios están fallecidos y el 36,40% están vivos.
En relación a la fecha en la que se cometieron los abusos, ordenados por décadas, se presenta que más del 80 % de los casos se produjeron en el siglo XX, y el 75% antes de 1990.
- Anteriores a 1950: 2
- Entre 1950 y 1960: 40
- Entre 1960 y 1970: 137
- Entre 1970 y 1980: 172
- Entre 1980 y 1990: 127
- Entre 1990 y 2000: 45
- Entre 2000 y 2010: 20
- Entre 2010 y 2020: 60
- A partir de 2020: 34
- Sin fechar: 91
Acoger todos los testimonios: la condición de víctima no prescribe
Como precisa el Episcopado, las Oficinas de Protección a Menores -más de 200-, tienen una dimensión pastoral, no judicial, por lo que pueden acoger todos los testimonios. “No hay prescripción porque la condición de víctima no prescribe”, dice la CEE. “Un testimonio siempre es relevante, aunque date de muchas décadas atrás, aunque se refiera a alguien que ya ha fallecido”, añade.
“Lo importante, agrega, es que cualquier víctima de abusos sexuales cometidos en la Iglesia sepa que hay un lugar en el que se le quiere conocer y escuchar. Un lugar que existe porque la Iglesia reconoce el daño causado y porque la Iglesia quiere ayudar a todas las víctimas en su acogida, en su acompañamiento, en su sanación y en su reparación. Y porque la Iglesia quiere que no pueda volver a pasar”.
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