ʱú. Roxane Calle: Aguchita, un corazón abierto para acoger a todos con amor
Renato Martinez – Ciudad del Vaticano
“La beatificación de la Aguchita para la Iglesia, en particular, representa un estímulo adicional para afianzar nuestra fe en Dios y acercarnos a Él, toda vez que se podrá rendir culto a una connacional, primera mártir peruana, por sus comprobadas virtudes cristianas”, lo dijo Roxane Calle, Vicepostuladora de la causa de beatificación de María Agustina Rivas López, conocida como “Aguchita”, explicando las virtudes cristianas y el legado que nos ha dejado esta religiosa y mártir peruana, quien será beatificada este 7 de mayo de 2022, en la localidad de La Florida, en la Diócesis de San Ramón, ubicada en la selva central del Perú.
¿Cuáles son las virtudes cristianas que más han caracterizado la vida religiosa de Aguchita?
R/. De lo que hemos podido conocer a través de los testimonios que recogimos como parte del proceso de beatificación, testimonios de aquellas personas que tuvieron la oportunidad de conocer a Aguchita, de compartir con ella, nos indican pues que era una mujer con muchos dones y virtudes cristianas. Entre las virtudes cristianas que identificaron a Aguchita es de destacar su humildad, paciencia, templanza y caridad. Era una mujer prudente, puesto que no hacía las cosas por azar, sino que se preparaba diligentemente para asumir cada responsabilidad que le tocaba dentro de su congregación. Su riqueza, grandeza y excepcionalidad se encontraban en su corazón y su compromiso con el servicio y ayuda al prójimo por su profunda convicción religiosa y su fe en Dios. Su estilo de vida estuvo marcado también por la templanza y esto se ve reflejado en su entrega a favor del prójimo hasta el final de su vida. Y la paciencia, que siempre está presente en quién ayuda decidida y desinteresadamente a sus semejantes.
Si alguna virtud caracterizó más a Aguchita esta fue la caridad, y en esto coinciden todos los testimonios y es que era una persona de corazón abierto, un corazón siempre preparado para acoger con amor a todos sin distinción, con las manos abiertas para actuar al servicio de los demás, siempre dispuesta. Decía en una de sus cartas, “tengo que aprovechar el tiempo que vuela, de lo contrario, me presentaría con las manos vacías en la eternidad”. Esto nos indica pues, su constante preocupación por hacer con sus manos las buenas obras que agradan a Dios.
¿Cuál es el significado de la beatificación de Aguchita para la iglesia particular de San Ramón y del Perú?
R/. La beatificación de la Aguchita para la Iglesia, en particular, representa un estímulo adicional para afianzar nuestra fe en Dios y acercarnos a Él, toda vez que se podrá rendir culto a una connacional, primera mártir peruana, por sus comprobadas virtudes cristianas. En general, para la Iglesia peruana representa una gran oportunidad para fortalecer la institucionalidad religiosa en el país, toda vez que al tener una beata que ha sido reconocida como tal por sus virtudes, no solo por la ofrenda de su vida por causa de su fe, lo cual es supremamente importante sin duda, sino también por llevar una vida de coherencia, de palabra y de acción que agrada a Dios, una vida de santidad y que nos permite soñar también con ello.
Pues, todos estamos llamados a la santidad en nuestra vida diaria, para los laicos es muy importante comprender en estos tiempos que podemos aspirar a cosas grandes, como dice el Papa, “sueñen que el mundo con cada uno de nosotros puede ser distinto”. Ahora, tendremos una beata de al frente a la que podemos mirar todos los días para imitar su ejemplo, de manera que podamos promover una mayor práctica de valores y virtudes cristianas en nuestro país, qué, dicho sea de paso, hoy nos hace mucha falta.
¿Cuál es el legado que nos deja Aguchita a todos los cristianos, y a la Vida Religiosa?
R/. Se ha dicho, y con toda razón que, Aguchita es la santa de a lado, pero además para los laicos y para todos los cristianos en realidad, creo que podemos verla como la santa de al frente, es decir, aquel modelo de vida que no podemos dejar de ver en nuestro quehacer diario. Aguchita encontró el verdadero sentido de la vida en la entrega y el servicio a los demás, imitando a Jesús Buen Pastor y que nosotros también estamos llamados a practicar y promover esta vida. Por tanto, en la vida de Aguchita nos deja como mensaje principal la importancia de la coherencia entre la creencia o el pensamiento en Dios y la práctica cabal de las virtudes y valores, ello como orientación o paradigma de conducta de todos los cristianos.
La vida religiosa no solo es creencia subjetiva en Dios, sino fundamentalmente, creo que implica un hacer constante de tales virtudes y valores en lo cual, la verdadera ayuda al prójimo juega un rol preponderante. Todo cristiano debe propender a dicho estilo de vida con una humildad, prudencia, justicia, templanza, paciencia y caridad semejantes a los de Aguchita, ese es su legado para todos nosotros.
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