Obispos de Bolivia: Urge un diálogo social ante la situación de violencia y desigualdad
Pope
“Somos diferentes y podemos tener visiones muy distintas, pero compartimos un solo país”: Lo afirmó monseñor Ricardo Centellas, arzobispo de Sucre y presidente saliente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), al abrir, ayer, la CIX Asamblea de Obispos de Bolivia, reunida hasta el próximo 16 de noviembre, de forma presencial en la Casa “Cardenal Clemente Maurer” de Cochabamba. “Estamos llamados a buscar espacios de encuentro fraterno, abrirnos a un diálogo sincero y cercano, apostar por una cultura de paz”, agregó el prelado al exhortar al pueblo boliviano a caminar juntos para encontrar soluciones que favorezcan a todos.
Una tregua social para enfrentar la crisis
Ante la situación sociopolítica y económica actual, monseñor Centellas apuntó que es muy delicada y propone al país “una tregua social amplia para afrontar estos momentos críticos que estamos viviendo”. El prelado también subrayó que “la pobreza causa desigualdad social” e invitó a los gobernantes que “se construyan sistemas de protección social, como estrategia para prevenir retrocesos y agudización de la pobreza en el país».
“La mala distribución e inversión de los recursos del Estado no ayuda a iniciar procesos sostenibles de desarrollo integral para todos”, señaló monseñor Centellas al afirmar que, en Bolivia, aproximadamente, dos millones de personas se encuentran en situación de vulnerabilidad y de retorno a la pobreza. “Es el momento – reiteró - para construir sistemas de protección social, como estrategia para prevenir retrocesos y agudización de la pobreza”.
Una la situación de violencia desatada
Un llamado al diálogo y a la reconciliación hizo también el nuevo presidente de la CEB Monseñor Aurelio Pesoa, Obispo del Vicariato Apostólico de Beni. Junto a monseñor Ricardo Centellas, arzobispo de la Arquidiócesis de Sucre como vicepresidente y a monseñor Giovani Arana, Obispo de la Diócesis de El Alto como Secretario General, conforman la nueva presidencia de la institución para el próximo trienio.
&苍产蝉辫;“Apostemos por el diálogo sincero y honesto como personas que amamos a este país”, reiteró Monseñor Pesoa en una entrevista con “Iglesia Viva”, el órgano de comunicación de la CEB, ante “la situación de violencia desatada en el país”. En este sentido, subrayó la gran preocupación de la Iglesia pues se piensa que se pueda acentuar y se teme se convierta en peligrosa.
Nuevamente Monseñor Pesoa convoca al diálogo, con la disponibilidad de ambas partes, sin buscar competencias entre ganadores y perdedores. “Los ganadores deberíamos ser todos los bolivianos sin importar el color político o la razón social que cada uno tenga”, subrayó el obispo. Además, enfatizó que la misión de la Iglesia es llamar a la reconciliación, paz y entendimiento. Pero sobre todo insistir en el diálogo: “Un católico es persona de diálogo, es la persona de acercamiento, es la persona de paz, que busca la reconciliación”
Sacerdotes y religiosos caminan con sus pastores
La Asamblea Plenaria del episcopado boliviano recibió el saludo de la Conferencia Boliviana del Clero Diocesano, que pide “una mirada atenta a sus sacerdotes”. En su mensaje, los presbíteros renuevan su compromiso y su deseo de caminar juntos, en sinodalidad.
“A ustedes que en medio de tanto conflicto, división, violencia y asedio político se reúnen para que al final de la Asamblea nos den su mensaje de esperanza para la sociedad y para la Iglesia boliviana”, se lee en el mensaje.
El mensaje del clero boliviano concluye con un agradecimiento porque en estos tiempos de pandemia los pastores pueden ser un signo para poder “superar nuestros temores y tomando el arma de la oración y los cuidados necesarios sigamos nuestra misión de pastoreo en las comunidades parroquiales".
Por su parte, la Conferencia Boliviana de Religiosas y Religiosos, saludó a los Obispos de Bolivia reunidos en su CIX Asamblea Plenaria. El documento da cuenta del caminar de los religiosos en Bolivia en tiempo de pandemia de COVID 19 y en medio de los conflictos que vive el país. A la vez que se compromete a un trabajo conjunto con la nueva directiva de la Conferencia Episcopal y a mantener la presencia religiosa en los espacios de fronteras existenciales y físicas.
Por último, los laicos “llamados a ser luz y verdad”, expresaron su preocupación por el respeto a los derechos humanos, la libertad de expresión, la vida y la familia en Bolivia y compartieron algunas actividades sobre el servicio misionero de los laicos durante este tiempo: “Pedimos a nuestro buen Dios, que siempre los colme de bendiciones, y que juntos guiados e inspirados por el Espíritu Santo, sirvamos a nuestra iglesia peregrina, y siempre en salida”.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí