ҽ

El Salvador. Misioneras asesinadas en 1980, ejemplo de entrega

La vida para los cristianos católicos no fue fácil durante la guerra civil en El Salvador. En la memoria de la Iglesia y de los salvadoreños cientos de nombres dan testimonio de un episodio sangriento que desgarró la sociedad. La sangre de muchos misioneros y misioneras se mezcló con la del pueblo. Monseñor Oswaldo Escobar, obispo de Chalatenango, profundiza sobre el impacto de los mártires en la vida eclesial.

Manuel Cubías - Ciudad del Vaticano

El obispo de Chalatenango, monseñor Oswaldo Escobar recordó que este año 2020 fue declarado el 20 de enero pasado Año Jubilar Martirial y será clausurado el 2 de diciembre, con una eucaristía presidida por todos los obispos y celebrada en la catedral de Chalatenango.

Preguntado sobre el porqué de este año dedicado a los mártires, Escobar declaró que coinciden muchos eventos. “Muchos martirios cumplieron 40 años de acaecidos. 1980 fue un año cruento aquí en El Salvador. Chalatenango, que etimológicamente en lengua indígena significa “valle de aguas y arena” más bien se estuvo convirtiendo en un valle de sangre”.

El Año Martirial, para recoger la cosecha

El obispo declaró que es una tradición en su diócesis recordar a los mártires el día 2 de diciembre y enumeró algunos nombres de personas que ofrendaron sus vidas y que este año se celebra el 40 aniversario: monseñor Romero, el padre Spessotto, la masacre del Sumpul, las misioneras de Maryknoll, Ita Ford y Maura Clarke, quienes fueron asesinadas junto con la misionera laica Jean Donovan y la hermana ursulina Dorothy Kazel, miembros del equipo misionero de la Diócesis de Cleveland en El Salvador.

Este año, el día 2 de diciembre también se hará el cierre oficial del Año Martirial, afirma monseñor Escobara y añade: “en esta celebración se une la sangre de los mártires chalatecos, la sangre derramada de nuestros campesinos, catequistas y celebradores de la palabra con la de las misioneras de Maryknoll, quienes nos recuerdan el apoyo y solidaridad internacional. Paradójicamente el mismo gobierno que daba las balas para la guerra, con esas mismas balas, desgraciadamente, ellas fueron martirizadas”.

Mantener viva la esperanza

Escobar insistió en la necesidad de mantener viva la esperanza de este pueblo “y la sangre de ellas es semilla e nuevos cristianos”. El obispo subrayó la importancia de la memoria: “no podemos olvidar nuestra historia, y si la recordamos es para seguir con ese impulso de cristianos, de nunca claudicar en nuestra fe y de nunca olvidar el sacrificio de todos y de todas ellas”.

Entrevista a Monseñor Oswaldo Escobar

Covid-19. La corrupción también genera mártires

Monseñor Escobar recordando a San Óscar Romero afirmó que somos una Iglesia, una gran familia de mártires. Y la pandemia ha causado muchas muertes, particularmente en el personal sanitario, no sólo en El Salvador, sino en varios países. Y esto Dios no lo quiere, “pues lo que se ha dado en muchas ocasiones, afirmó el obispo, es una situación de corrupción galopante. También la corrupción y la falta de transparencia generan mártires (…) y muchos miembros del personal de salud han entregado su vida al servicio del prójimo (…) gente tan buena y sacrificada que han dado su vida por atender a los pacientes del Covid”.

El Papa: “estas mujeres vivieron su fe con gran generosidad”

El Papa Francisco en la audiencia general del 2 de diciembre, recordó que hoy se cumplen “40 años de la muerte de cuatro misioneras norteamericanas asesinadas en El Salvador: las hermanas de Maryknoll, Ita Ford y Maura Clarke, la monja ursulina Dorothy Kazel y la voluntaria Jean Donovan”. Los asesinatos se produjeron en el contexto de la guerra civil que durante doce años desgarró la sociedad salvadoreña.

Francisco puntualizó y dijo: “fueron secuestradas, violadas y asesinadas por un grupo de paramilitares. Estaban sirviendo en El Salvador en el contexto de la guerra civil. Con compromiso evangélico y asumiendo grandes riesgos, llevaron alimentos y medicinas a los desplazados y ayudaron a las familias más pobres. Estas mujeres vivieron su fe con gran generosidad. Son un ejemplo para que todos se conviertan en fieles discípulos misioneros”.

La celebración será transmitida a través de numerosas radios y canales de televisión, así como por las redes sociales de la diócesis:

Agradecemos la colaboración del padre Miguel Vásquez S.J.

Entrevista al obispo de Chalatenango monseñor Escobar

 

 

 

Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí

02 diciembre 2020, 15:57