Teólogos CLAR: “Ojalá no permanezcamos al margen de lo que sucede en Amazonía”
Mireia Bonilla – Ciudad del Vaticano
Un grupo de teólogas y teólogos de la Confederación Latinoamericana de Religiosos escriben un dirigido a los Consagrados en América Latina y el Caribe en el que les animan a estar en sintonía de comunión y oración con el Sínodo que este mes de octubre se realizará en Roma. “Este Sínodo será un momento especial desde muchos puntos de vista, ya que reunirá voces de diversos contextos que se armonizarán en la experiencia del “caminar juntas/os”, escriben en el mensaje y aseguran que en este recorrido sinodal, “la escucha” es el simbolismo real de lo que se entiende hoy por sinodalidad.
Intrumentum Laboris: más de 80.000 voces venidas de las riveras de los ríos amazónicos y selvas
También hablan acerca del Intrumentum Laboris, el cual dice que la Amazonía y los pobres son un lugar teológico desde el cual Dios se revela y nos llama a todos a vivir nuestra identidad humana y cristiana de una manera nueva. Para la elaboración de este documento, los teólogos destacan el aporte de las más de 80.000 voces venidas de las riveras de los ríos amazónicos y de las selvas. “Estas voces – expresan – contienen el aliento de la Ruah divina que quiere hacer nueva todas las cosas, devolviendo a la Iglesia su vocación de sierva y signo del Reino, como se prefiguró en el Concilio Vaticano II”.
Dentro del Intrumentum Laboris hay un sueño para los Consagrados
En el mensaje, el equipo de la CLAR asegura que en el Documento de Trabajo del Sínodo hay “un sueño vivo para los Consagrados”: promover una vida consagrada alternativa y profética, inter-congregacional, interinstitucional, con un sentido de disposición para estar donde nadie quiere estar y con quien nadie quiere estar. “Ojalá no permanezcamos al margen de lo que sucede en la Amazonía, ni en sus muchos pueblos y culturas y reaccionemos proféticamente frente a su sistemática destrucción” expresan.
Una Vida Consagrada en sintonía con la madre tierra
Al final del mensaje, los teólogos de la CLAR exhortan a los consagrados a poner en práctica una actitud “de escucha, participación y respeto en la diversidad”, pero también una actitud “orante, mediada por el diálogo, el discernimiento y la fraterna colaboración”, para poder así asumir un estilo de vida nuevo amparado en una conducta ética que se haga mística y profecía de lo que queremos ser y hacer.
“Hagámoslo desde una Vida Consagrada reconciliada y en sintonía con la madre tierra y con todas las especies vivas, en comunión con todos los hombres y mujeres que se gastan sin egoísmos y sin reservas en el cuidado de la vida. Hagámoslo desde nuestra conversión pastoral, ecológica y sinodal”, concluyen la nota.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí