蜜桃交友

Ciudad del Vaticano

La Oficina de Comunicación y Prensa de la Conferencia Episcopal paraguaya hizo público el 8 de marzo desde Asunción las conclusiones de su última Asamblea, la n° 220 en la que los Obispos invitan a todos, “con un renovado espíritu de compromiso”, a vivir esta Cuaresma “con la mirada fija en nosotros mismos”, para dirigirse a las Pascua de Jesús, haciéndose “prójimos de nuestros hermanos y hermanas que pasan dificultades” y “compartiendo con ellos nuestros bienes espirituales y materiales”.

Y así – agregan inspirándose en el Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma de este año – “acogiendo en lo concreto de nuestra vida la victoria de Cristo sobre el pecado y la muerte, atraeremos su fuerza transformadora también sobre la creación”.

Asimismo los Obispos de Paraguay informan que han tratado diversos temas durante toda la semana durante la que pudieron “vivir un verdadero encuentro de comunión con los responsables de las coordinaciones pastorales y vicarios de todo el país”.

Explican que se trató de un encuentro trascendente y de mucha “sinodalidad”, que les permitió escuchar el maravillo trabajo que se realiza día a día desde las diversas pastorales. También agradecen al Nuncio Apostólico por su cercanía y acompañamiento y valoran su mensaje de aliento “para seguir trabajando por el bien de la Iglesia que peregrina en Paraguay con sentido de responsabilidad y unanimidad”.

Los Obispos también manifiestan que en el inicio de la Cuaresma han tenido la bendición de poder compartir la Eucaristía presidida por Monseñor Juan Gavilán, Obispo de Coronel Oviedo. Y añaden que unidos al Papa Francisco hacen suyo su mensaje de esperanza, a saber: que “el camino hacia la Pascua nos llama, precisamente, a restaurar nuestro rostro y nuestro corazón de cristianos, mediante el arrepentimiento, la conversión y el perdón, para poder vivir toda la riqueza de la gracia del misterio pascual”.

Por otra parte recuerdan que en su calidad de Presidente del Episcopado paraguayo, Monseñor Adalberto Martínez, participó en el encuentro organizado por el Papa Francisco – del 21 al 24 de febrero – “para entender, asumir y corregir el pecado grave, el crimen de los abusos sexuales cometidos contra menores y personas vulnerables en la Iglesia”.

A la vez que agradecen y felicitan al Santo Padre por este histórico encuentro”, que reunió a alrededor de 200 líderes religiosos de todo el mundo, lo que “anima a todos los miembros de las Conferencias Episcopales del mundo y diócesis a seguir trabajando por los más necesitados y vulnerables”.

Y no dudan en afirmar que “la sanación, prevención y protección irrestricta de la dignidad de las personas, sobre todo de los niños y adolescentes, así como del prójimo más vulnerable, exigen una auténtica conversión pastoral y personal de los clérigos, religiosos, agentes pastorales, educadores y colaboradores de la Iglesia. Debemos volver a las fuentes del Evangelio, seguir las actitudes del maestro y vivir el espíritu de las bienaventuranzas”.

Ante este desafío, durante su Asamblea, los Obispos afirman que asumieron cinco compromisos que los ayudarán a tomar medidas concretas e inmediatas:

Cinco compromisos que los ayudarán a tomar medidas concretas e inmediatas

Se trata de promover la creación de un Equipo técnico en la Conferencia Episcopal Paraguaya, que trabaje con la colaboración de la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” y la Conferencia de Religiosos y Religiosas del Paraguay para las capacitaciones en prevención y actuación en casos de abusos contra menores y personas vulnerables.

Equipo técnico que se encargará de mantener un contacto fluido y permanente con los delegados de las Diócesis y Congregaciones religiosas, a los efectos de contar con informaciones certeras del procedimiento iniciado a clérigos o laicos por casos de abusos sexuales contra menores y personas vulnerables.

Crear un observatorio con la colaboración de la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” con el fin de desarrollar investigaciones acerca de todo tipo de abusos, particularmente en contra de menores y personas vulnerables en el país tendientes a afrontar la problemática con mayor propiedad desde el punto de vista científico.

Establecer auditorías internas permanentes que permitan hacer efectivas las directivas de actuación y de prevención en casos de abusos sexuales contra menores y personas vulnerables.

Y promover la difusión, conocimiento y acciones acordes a las directrices del “Protocolo de prevención de abusos sexuales contra menores en instituciones católicas”, principalmente entre seminaristas, sacerdotes y agentes pastorales.