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Ciudad del Vaticano

"Congoleños, permanezcamos atentos para que no nos roben nuestra victoria". Este es el llamamiento lanzado por el Comité Laico de Coordinación (CLC), mientras continúa el recuento de votos de las elecciones generales celebradas en la mayor parte de la República Democrática del Congo el 30 de diciembre. El CLC es la organización católica que promovió las tres marchas celebradas en 2018 para exigir el cese de poder del presidente saliente, Joseph Kabila.

Necesidad de un cambio real

"El simple cambio en la continuidad no será tolerado", asegura el Comité en su declaración aludiendo a una posible proclamación de la victoria como Jefe de Estado del candidato del partido de Kabila, el ex Ministro del Interior, Emmanuel Ramazani Shadary.

Resultados esperados para el 6 de enero

Tal como afirma la agencia de noticias Fides, los temores de la oposición al fraude se ven acentuados por la decisión de las autoridades de Kinshasa de suspender indefinidamente las conexiones a Internet y el envío de mensajes SMS. La Comisión Electoral Independiente (CENI) ha confirmado que el anuncio de los resultados será el 6 de enero.

La obra de la Iglesia

Por su parte, la Conferencia Episcopal Congoleña (CENCO) ha pedido calma y asegurado el despliegue de unos 40.000 observadores electorales.

A través de un comunicado oficial, el Episcopado de esta nación afirma que ha recogido datos sobre una muestra significativa de colegios electorales de todo el país, el 22,32%: "2.853 colegios electorales estaban abiertos a las 6 de la mañana -explica la nota-, sin embargo otros 830 colegios no trabajaron al máximo rendimiento por las siguientes razones: retrasos organizativos, largos procedimientos de apertura, mal funcionamiento de las máquinas de votación, etc".

Un contexto difícil

Cabe recordar que las elecciones, previstas para el 23 de diciembre, se aplazaron una semana debido a una disfunción organizativa agravada por la destrucción de más de 8.000 máquinas electorales en un almacén de la capital, Kinshasa. Asimismo, la CENI ha decidido posponer la votación en marzo en tres localidades de Beni, Butembo y Yumbi, debido a la epidemia del Ébola y a las graves condiciones de inseguridad.