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Mireia Bonilla – Ciudad del Vaticano

Con motivo del 400 aniversario del nacimiento del carisma de San Vicente de Paúl en el servicio a los pobres, desde hoy hasta el 21 de octubre se está desarrollando en el Centro Mariapolis de Castel Gandolfo, localidad italiana conocida por encontrarse la residencia de verano de los Papas, el Festival de cine internacional dedicado a la figura del santo, llamado "" (Encontrando a Vicente 400).

Se trata de una iniciativa de la familia vicenciana a la que están llamadas a participar todas las personas para contar el tema de la globalización de la caridad declinada en todos los idiomas artísticos.

En unas declaraciones para Pope, el padre Toma? Mavri?, CM, Superior General de la Congregación de la Misión de San Vicente de Paúl, explica que el objetivo principal del festival es “la globalización de la caridad” y eso significa – puntualiza – “que por medio del arte, del cine y de tanta riqueza que tenemos en las personas, en los actores y en los productores, podamos hacer un pequeño aporte, como un grano de mostaza, pero con el deseo y el sueño de que ese grano de mostaza vaya creciendo hasta llegar a ser un árbol”. Además, explica que en este sentido, es importante tener en cuenta la influencia que estos actores pueden tener ante el mundo, y en especial ante los jóvenes.

La globalización de la caridad es un sueño real

El padre Toma?  también expresa que es esencial que está globalización, este amor a los pobres, “llegue a abrir los corazones de todos”, porque “todos somos una familia” – “la familia humana” - puntualiza. Por tanto, la idea se resume en compartir y comunicar que la globalización de la caridad “no es sólo una idea o una ilusión; es un sueño”, y si nosotros soñamos juntos – dice – “los sueños se hacen realidad”.

Dar voz a los que no tienen voz

A través de diferentes películas, cortometrajes, largometrajes, incluso cosas que se han hecho en otros campos del arte, como dibujos y poemas, este festival pretende compartir y difundir esos “instrumentos tan fuertes” para “el bien” y para que los “pobres tengan voz”, dice el Superior General de la Congregación de la Misión de San Vicente de Paúl. Por último, expresa su exhortación a “abrir el corazón” y hacerlo “juntos” ante todas las personas que necesitan nuestra ayuda.